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Arena Naucalpan 7 de Enero 2010

by Gladiatores



Reseña Arena Naucalpan
Jueves 7 de enero de 2010
Texto: Diego Mejía Eguiluz
Fotos: José Lázaro Rodríguez

Aunque ya había pasado el seis de enero, los Reyes Magos tuvieron el tiempo de darse una vuelta a la arena Naucalpan y obsequiarle a los aficionados una emocionante velada luchística que estuvo coronada con una gran exhibición de lucha a ras de lona en su combate estelar.

La Dinastía de la Muerte (Negro Navarro, Trauma I y Trauma II) enfrentaron al trío conformado por Ultramán júnior, Angélico y el reaparecido Solar en este combate en el que no hubo ni rudos ni técnicos: simplemente luchadores.

Las acciones las abrieron Angélico y el Trauma I, y ninguno de los dos cedía terreno a su rival. Ambos luchadores castigaban tanto los brazos como las piernas de sus adversarios con infinidad de llaves que parecían imposibles de romper, pero los recursos de estos gladiadores les permitían escapar y a su ver colocar ellos un nuevo castigo.

Es de admirar, dicho sea de paso, la condición física de Angélico y el Trauma I, quienes combatieron por más de doce minutos entre ellos antes de otorgar el relevo a sus compañeros.

A esta gran exhibición le siguieron el Trauma II y Ultramán júnior. Se pensaba que el heredero de Milo Ventura saldría en desventaja, pues se especializa más en el estilo aéreo, pero Ultramán júnior se comportó a la altura y resistió los embates del Trauma II, quien de todos modos se dio gusto aplicando una buena variedad de llaves.

Solar y Negro Navarro siguieron, y tal como han acostumbrado a los aficionados, se enfrascaron en interesante combate con derribes, llaves y proyecciones que hacían pensar que se estaba disputando un campeonato mundial.

Esa primera caída resultó favorable para el bando de Solar, Angélico y Ultramán júnior, quienes todavía tuvieron una segunda ronda de llaveo con sus adversarios en el capítulo inicial.

Los aficionados se llevaron una grata sorpresa al comprobar que los seis luchadores no habían acabado con su arsenal de llaves y castigos en la segunda caída. Y para hacer aún más interesante la contienda, se conformaron nuevas parejas: Trauma II ofreció férrea resistencia a Solar; Trauma I lidió con Ultramán júnior y Angélico y Negro Navarro volvieron a hacer las delicias del público. Ese cambio de rivales resultó ser una buena estrategia para la Dinastía de la Muerte, pues fueron ellos quienes se impusieron en la segunda caída.

Negro Navarro y Solar abrieron la tercera caída y parecía que ahí mismo terminaría el combate, pues ambos luchadores lograron colocar llaves de rendición que alguien con menos preparación no aguantaría. Trauma II y Angélico buscaron darle la ventaja a su bando y terminaron neutralizándose entre sí. Trauma II atrapó a Angélico con una dolorosa estaca india y tirantes a los brazos que combinó con toque de espaldas; el problema fue que él también tenía las espaldas planas y ambos luchadores escucharon la cuenta de los tres segundos.

Ultramán júnior voló en tope sobre el Trauma I (acción en la que resultó lastimado el Trauma I) y el escenario quedó listo para que Solar y Negro Navarro definieran quién se llevaría la victoria.

Solar buscó la victoria vía toque de espaldas, pero el Negro Navarro pudo escapar en todo momento. Negro Navarro, por su parte, aplicó una media tapatía que Solar aguantó y logró voltearle. Negro Navarro resistía hasta que Solar combinó la media tapatía con una cavernaria. El castigo fue demasiado y el capitán de la Dinastía de la Muerte se rindió.

La gente, feliz con el espectáculo que vio durante casi cuarenta minutos, premió a los seis contendientes con una lluvia de dinero. Solar, mientras tanto, retó al Negro Navarro a un duelo por el campeonato de las Américas en poder del ex Misionero de la Muerte.

En la lucha semifinal, los técnicos Pantera, Mike “Suicida” Segura y Zatura fueron presa de la astucia de los Terribles Cerebros (Doctor Cerebro, Cerebro Negro y Black Terry).

Los técnicos buscaron la ventaja al inicio del combate castigando el brazo y el hombro de Black Terry, pero el otrora Temerario resistió los embates tanto de Pantera como de Mike Segura. Doctor Cerebro y Cerebro Negro, molestos por el artero ataque sobre su capitán, se fueron con todo sobre los científicos, que se vieron sorprendidos por el ataque en conjunto y terminaron entregando la primera caída a sus rivales.

Por el mismo tenor iba el capítulo intermedio, con un claro dominio de parte de los campeones de tercias del Estado de México. Pero los Cerebros cometieron el error de perdonar a sus rivales, en lugar de liquidarlos cuando tuvieron ocasión de hacerlos, y los tres técnicos mostraron sus mejores galas en el estilo aéreo para empatar los cartones de manera vertiginosa.

La tercera caída fue la más polémica de la noche. Después de un par de topes de Mike Segura y Zatura sobre Black Terry y Cerebro Negro, Pantera hizo frente al Doctor Cerebro, quien se quitó una plancha antes de la tercera palmada empujando a su rival.

La mala suerte acompañó al Pantera, pues cayó encima del réferi Toby, quien se incorporó para amonestar al técnico. Esto lo aprovechó Doctor Cerebro para jalar la pierna de Pantera y provocar que el científico fauleara al nazareno y su compañero el Grillo (cuya atención había estado centrada en los cuatro que estaban fuera del ring y por eso no vio el truco del Doctor Cerebro) otorgara el triunfo a los rudos por la vía de la descalificación.

De agridulce podría calificarse el debut como tercia de Brazo júnior, Brazo Metálico y Brazo de Plata júnior. Los jóvenes integrantes de la dinastía Alvarado salieron dispuestos a agradar y convencer al exigente público de Naucalpan, pero no contaban con que enfrente tendrían a unos experimentados y mañosos rudos que no estaban dispuestos a ser escalón de nadie: Avisman, el Hijo del Diablo y el Gringo Loco.
Los tres Brazos demostraron que tienen dominio de la lucha clásica, pero también manejan los lances suicidas; en especial el Brazo Metálico, quien ejecutara una plancha de 450 grados hacia fuera del ring y, posteriormente, un espectacular mortal en reversa, también hacia fuera del cuadrilátero, que levantó a la gente de sus asientos.

Al final los técnicos no pudieron llevarse la victoria en esta presentación como tercia, pues el Hijo del Diablo, quien ya estaba eliminado en la tercera caída, entró cuando los réferis estaban distraídos y le arrebató la máscara al Brazo Metálico. Gringo Loco aprovechó esa colmillada del Diablo y planchó al Brazo Metálico, mientras que Avisman hacía lo propio con el Brazo júnior para sellar el triunfo rudo.

En la segunda de la noche, los jóvenes Eragon e Imperial sufrieron, pero al final pudieron imponerse en tres caídas a la dupla conformada por Comando Negro y Flama Infernal.

A lo largo del combate, Comando Negro e Imperial tuvieron un duro intercambio de golpes entre sí, mientras que Eragon, nuevamente, sufrió a manos de sus rivales, que se han empeñado en arrebatarle la máscara cada que se lo encuentran en el ring.

Flama Infernal, por su parte, demostró que ya superó los nervios que lo acompañaron en su debut y mostró que puede causar varios dolores de cabeza a los técnicos.

En el primer combate de la noche, Volaris se impuso en un mano a mano pactado a una caída al reaparecido Halcón 2000, quien da muestras de que pudiera convertirse en rudo en cualquier momento.

Sigan los pormenores de las funciones de la Arena Naucalpan, todos los jueves, en vivo, a través de http://radio.thegladiatores.com

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