Arena Naucalpan 6 de Diciembre

Reseña Arena Naucalpan
Domingo 6 de diciembre de 2009
Texto y fotos: Diego Mejía Eguiluz

El pique entre Brazo de Plata y Pirata Morgan continúa vigente. Ambos gladiadores se enfrentaron en la lucha estelar del pasado domingo en la Arena Naucalpan.

El también conocido como Súper Porky se alió al importado Angélico y a Alebrije con Cuije, mientras que el autonombrado Mejor luchador del mundo tuvo por compañeros al creyente Veneno y al Hijo de Cien Caras.

Veneno y Angélico se encargaron de abrir las hostilidades con un interesante duelo a ras de lona donde Angélico tuvo la oportunidad de lucir sus cualidades; claro que el iluminado Veneno no desconoce el terreno de las llaves y contrallaves y demostró ser un duro rival para el técnico.

Una vez que terminó ese primer enfrentamiento, los rudos decidieron comenzar el ataque en montón sobre sus rivales, para no permitirles asentarse en la batalla. Incluso el pequeño Cuije no se salvó del feroz ataque de los rudos, que no tuvieron consideración alguna con su estatura.

Sin embargo, y a pesar de tener la ventaja psicológica por el ataque en sorpresa, los técnicos tuvieron los recursos necesarios para reaccionar y ser ellos quienes se anotaran la primera caída, la cual fue finiquitada con un sentón del Brazo de Plata sobre Veneno.

Los rudos, molestos por la manera en que cayeron, se fueron con todo en la segunda caída. Nuevamente Cuije fue el centro del ataque de los malosos. Brazo de Plata, Alebrije y Angélico poco pudieron hacer para auxiliar a su acompañante, pues Hijo de Cien Caras, Veneno y Pirata Morgan no aflojaron el ritmo hasta que empataron la contienda. Hasta el Cuije fue rendido cuando Pirata Morgan le aplicó una tapatía.

En la tercera caída, la lucha tuvo algunos momentos cómicos, propiciados por la chispa y carisma de Brazo de Plata y Cuije.

Los rudos comenzaron a desesperarse por las burlas de las que eran sujetos, y una vez que se les acabó la paciencia volvieron a demostrar por qué se les considera como tres gladiadores con los que hay que tener cuidado.

Angélico y Alebrije se trenzaron en un feroz duelo debajo del ring con Veneno y el Hijo de Cien Caras, dejando en el centro del ring a sus respectivos capitanes para definir la contienda.

Los réferis Rubinsky y Grillo resultaron insuficientes para toda la acción que se estaba desarrollando, y decidieron centrar su atención en lo que ocurría debajo del encordado. Craso error resultó ser esto, porque Pirata Morgan aprovechó la distracción no sólo para faulear al Brazo de Plata, también para fingir que había sido él quien recibió el golpe prohibido.
El Grillo fue el primero en percatarse de esta situación y dudó en a quién hacerle caso. La gente gritaba al Grillo que el de la trampa era Morgan, y por un momento estuvo a punto de creerles, pero al final decidió seguir su intuición y cayó en la trampa del rudo, otorgándole a él y a su bando la victoria por descalificación.

Brazo de Plata, indignado por la manera en que cayó derrotado, amenazó con acabar con el Pirata Morgan en los próximos enfrentamientos que tengan.

El duelo semifinal resultó de alarido. El japonés Bushi hizo su primera presentación sin máscara. Acompañado del Suicida Mike Segura y de Zatura, el nipón se enfrentó a los verdugos de su identidad, Oficial 911 y AK-47 (no olvidemos que AK-47 fungió como sécond en esa lucha de máscara contra máscara y se la pasó interviniendo en el combate), y el Fantasma de la Ópera.

Bushi estaba deseoso de venganza, pero 911 de manera muy astuta se la pasó rehuyendo el combate en la primera caída, con lo cual logró sacar de sus casillas tanto al oriental como a sus compañeros de tercia.

Los Oficiales y el Fantasma comenzaron a atacar de manera bestial a los técnicos, que no podían ni siquiera meter las manos.

Zatura y Mike Segura eran torturados tanto arriba como abajo del ring por AK-47 y el Fantasma de la Ópera, mientras que Bushi era víctima del alevoso ataque de 911.

Ese primer episodio resultó bastante disparejo, pero los Oficiales cometieron el error de no soltar a Bushi cuando éste ya había sido rendido. Por más que Rubinsky y el Grillo les advertían, los representantes de la ley continuaban con su labor destructiva y se hicieron merecedores de la descalificación.

Poco importó esto a los rudos, y para la segunda caída continuaron haciendo sufrir a sus oponentes.

Nuevamente, AK-47, 911 y Fantasma de la Ópera lograron rendir a los técnicos, y en esta ocasión sí los soltaron a tiempo, para que el combate se empatara a una caída por bando.

La ventaja ruda era excesiva, pero los técnicos tomaron un segundo aire y su reacción estuvo a la altura de las expectativas del público.

Bushi recordó sus inicios como luchador rudo, mientras Mike Segura y Zatura demostraron que pueden ponerse al tú por tú con quien sea, en el estilo que sea. Ahora eran los rudos los que pedían paz, pero no encontraron esa ansiada misericordia.

Después de dos espectaculares vuelos hacia fuera del ring sobre AK-47 y Fantasma de la Ópera, cortesía de Zatura y Mike Segura, Bushi se dispuso a vengarse de su verdugo 911.
El Oficial estuvo a punto de dar la campanada, pero en esta ocasión pudo más el empuje del japonés, quien se llevó al conteo de tres segundos a su rival para que fueran los técnicos los que se alzaran con la victoria en este emocionante duelo que fue premiado con una merecida lluvia de dinero.

911, quien se negaba a aceptar la derrota, retó a Bushi a un duelo por el campeonato de peso ligero en poder del japonés.

Después de haber defendido exitosamente su cinturón de tercias el jueves pasado, los Terribles Cerebros volvieron a dar cátedra, ahora sobre los técnicos Exodia, Freelance y Eragón.

Eragón fue quien inició las acciones con un muy buen intercambio de llaves con el Doctor Cerebro, que le valió el reconocimiento del rudo. Lo mismo hicieron Freelance y Black Terry, pero después de esto los campeones se olvidaron de cortesías y se abalanzaron sobre sus rivales con un ataque tan despiadado como efectivo. Fue tan contundente ese cambio de estrategia, que Exodia no tuvo ocasión de entrar a defender a sus compañeros. La rendición de los técnicos en esa primera caída fue de mero trámite.

En la segunda caída las acciones iban por el mismo tenor. Los raquetazos del Cerebro Negro hacían mella en sus oponentes, sobre todo en Exodia, quien terminó con el pecho enrojecido.

Los técnicos alcanzaron a reaccionar, inspirados por la espectacularidad que siempre ha caracterizado a Freelance. Eragón y Exodia entendieron a la perfección ese cambio de estrategia y comenzaron a demostrar sus recursos aéreos. Esto bastó para que las acciones se empataran.

En la tercera caída, las aguas volvieron a su cauce, y aunque los técnicos intentaron por todos los medios posibles llevarse la victoria, un error de Exodia en vuelo hacia fuera del ring abrió la puerta para que los Cerebros y Terry retomaran el control de la batalla y terminaran imponiéndose en la tercera y definitiva caída.

En la segunda lucha de la función, los Gemelos Fantásticos se enfrentaron a los reaparecidos Mixteco júnior y Anubis.

Aunque los rudos tuvieron ocasión de demostrar sus cualidades y su estilo recio a la hora de gladiar, fueron los Gemelos los que lograron salir victoriosos después de tres disputadas caídas.

En el duelo inicial, el rudo Keshin Black se llevó una importante victoria al derrotar en dos caídas consecutivas al técnico Alan Extreme. El duelo fue dominado en todo momento por el rudo, y aunque el científico tuvo una breve reacción, no le alcanzó y al final salió derrotado.

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