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Sin duda alguna el racismo es un mal que cada vez mas seda en el medio deportivo, deportes como el futbol cada vez mas ponen reglas más estrictas en contra de los aficionados que hacen insultos racistas en contra de jugadores. Desgraciadamente este mal llego a la lucha libre americana, situación que es el pan de cada día en el país del tío Sam, por desgracia la victima de este mal en esta ocasión fue Alberto del Rio gladiador mexicano que llego a la empresa más poderosa del mundo la WWE, para ganar todo lo ganable y tras un altercado con un empleado de la empresa por comentarios racistas, WWE por miedo a una demanda del racista opto por despedir al talento mexicano, tras esta medida Alberto inicio una cruzada en contra del racismo sufrido y regreso a nuestro país, a la que algún día fue su casa AAA en donde fue bien recibido tanto por directivos y aficionados peor no todo fue miel sobre hojuelas y el Hijo del Perro Aguayo fue el que dio un paso al frente para decirle al Patrón quien es el que pone las reglas en México, el resultado de esto es historia por lo que el propio Alberto el Patrón nos habla de la afrenta del can, el racismo y su familia.
Sin duda alguna el racismo es un mal que cada vez mas seda en el medio deportivo, deportes como el futbol cada vez mas ponen reglas más estrictas en contra de los aficionados que hacen insultos racistas en contra de jugadores. Desgraciadamente este mal llego a la lucha libre americana, situación que es el pan de cada día en el país del tío Sam, por desgracia la victima de este mal en esta ocasión fue Alberto del Rio gladiador mexicano que llego a la empresa más poderosa del mundo la WWE, para ganar todo lo ganable y tras un altercado con un empleado de la empresa por comentarios racistas, WWE por miedo a una demanda del racista opto por despedir al talento mexicano, tras esta medida Alberto inicio una cruzada en contra del racismo sufrido y regreso a nuestro país, a la que algún día fue su casa AAA en donde fue bien recibido tanto por directivos y aficionados peor no todo fue miel sobre hojuelas y el Hijo del Perro Aguayo fue el que dio un paso al frente para decirle al Patrón quien es el que pone las reglas en México, el resultado de esto es historia por lo que el propio Alberto el Patrón nos habla de la afrenta del can, el racismo y su familia.
