Tras haber discutido acaloradamente hace una semana, a Silver King y Electroshock les llegó la hora de medirse en un cuadrilátero en un triangular donde también participaría Joe Líder. La modalidad fue en Bull Terrier Match (encadenados). El vencedor sería aquel que lograra tocar las cuatro esquinas de manera ininterrumpida.

El duelo, que en apariencia era de pronóstico reservado, terminó siendo una paliza despiadada en contra del integrante de la Hermandad 187. Y es que el pleito entre Silver King y Electroshock resultó ser una treta de los Maniacos para que Joe Líder se confiara. Apenas subió al ring el representante de DTU y se colocó la cadena al cuello, los Maniacos declararon que estaban más unidos que nunca y se le fueron encima, castigándolo de manera inmisericorde.

Líder trataba en vano de defenderse, pero ni Electroshock ni Silver King se encadenaron, por lo que tuvieron durante mucho tiempo total libertad de movimiento para ejecutar sus castigos sobre Joe Líder. Por más que los réferis Rubinsky y Toby, el comisionado y el promotor trataban de obligar a los Maniacos a que se encadenaran, éstos hacían caso omiso y en varias ocasiones trataron de estrangular al de la Hermandad con la cadena. Silver King incluso fue a vestidores por unas sillas metálicas, que estrelló en el cráneo de un muy maltrecho Líder.

Cuando finalmente lograron ponerle las cadenas a Silver King y Electroshock, Líder cobró un segundo aíre y se fue con todo sobre sus oponentes. Con base en sillazos y jalones y golpes con la cadena, Joe Líder fue mermando poco a poco la condición física de sus oponentes, pero poco le duró el gusto. Los Maniacos volvieron a atacar al son de dos contra uno, lastimándolo todavía más.

El combate fue ganado por Electroshock, quien sin mayores problemas tocó las cuatro esquinas del ring para alzarse con el triunfo.

En el duelo semifinal, los Oficiales AK-47, Fierro y 911 salieron en plan rudísimo ante Relámpago, la Chiva y el Gato Eveready.

Los técnicos buscaron el enfrentamiento uno a uno, a ras de lona, pero cada lograban aplicarle una llave a alguno de los rudos, sus compañeros se metían para romper el castigo. La estrategia rindió frutos pues los técnicos cayeron en la desesperación y resultaron presa fácil para los Oficiales en la primera caída.

El dominio de los representantes de la ley continuó en la segunda caída. La gran coordinación de los Oficiales quedó en evidencia con los castigos combinados que realizaron ante unos rudos que poco podían hacer. Sin embargo, un chispazo de Relámpago, combinado con la agilidad del Gato Eveready y la fortaleza de la Chiva fueron suficientes para sorprender con toque de espaldas triple al Oficial 911, capitán de la tercia ruda, y así empatar la contienda.

En el capítulo final, los técnicos levantaron de sus asientos a los aficionados con espectaculares vuelos. Los Oficiales no lograban neutralizar a sus oponentes, pero después de que Relámpago y la Chiva ejecutaran un par de mortales hacia fuera del ring, 911 hizo fallar al Gato Eveready y comenzó a patearlo con saña. AK-47 y Fierro se metieron al encordado y entre los tres le pusieron tal golpiza al felino, que los réferis Rubinsky y Toby (quienes se llevaron un par de empujones al tratar de separarlos) optaron por descalificarlos por exceso de rudeza.

Pese a salir victoriosos, los técnicos no quedaron conformes y pidieron una revancha.

En el evento especial, los exóticos Miss Gaviota y Bugambilia del Norte se aliaron a Chico Che para medirse ante Comando Negro, el reaparecido Arlequín Rojo y el debutante Hammer.

La picardía de los exóticos, así como la agilidad del guapachoso Chico Che fueron la clave para que esta tercia se impusiera en la primera caída.

Comando Negro y Arlequín Rojo emplearon las rudezas en la segunda caída, y con el apoyo del debutante Hammer, quien rindió a Bugambilia con una variante de cangrejo, lograron empatar la batalla a una caída por bando.

En la tercera y definitiva, una seguidilla de topes por parte de Bugambilia, Arlequín, Miss Gaviota y Hammer dejaron el terreno listo para que en duelo de capitanes, Chico Che y Comando Negro definieran la batalla.

El bélico rudo trató de ganar el encuentro con una rana invertida, pero Chico Che se zafó antes de la tercera palmada. Acto seguido, el tropicoso sorprendió con paquete al Comando, pero éste también rompió el contacto con la lona a tiempo.

Sin perder tiempo, Chico Che se lanzó una vez más al abordaje y con desnucadora y toque de espaldas dispuso, finalmente, del Comando Negro, quien alegaba haber separado la espalda antes de los tres segundos.

Tras la victoria, Chico Che retó a Comando Negro a un duelo de máscara contra cabellera.

En el segundo combate, los técnicos Dinamick Black y Centurión lucieron bastante, pero pudieron más las mañas de los rudos Alan Extreme y Carta Brava júnior, quienes salieron victoriosos después de tres reñidas caídas.

El final llegó cuando Alan Extreme aplica una guillota al brazo de Centurión, completando la maniobra con una fuerte palanca al brazo que le arrancó la rendición.

Para abrir el cartel, el técnico Tonatiuh se enfrentó a Epidemia en mano a mano pactado a una caída.

Pese a estar en desventaja la mayor parte de la lucha, Tonatiuh salió avante con castigo a las piernas de Epidemia.

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