Reseña Dragonmanía IX
Arena México
Sábado 23 de mayo de 2015
Texto: Diego Mejía Eguiluz
Fotos: José Lázaro Rodríguez y Diego Mejía Eguiluz
Como cada año, al llegar mayo, la empresa Toryumon realiza su magna función de aniversario en la llamada catedral de la lucha libre mexicana: la Arena México.
Y en esta ocasión la función era más que especial, pues se trataba del décimo aniversario de la empresa, y en el platillo estelar Último Dragón arriesgaba su máscara en contra de la cabellera del iraní Tiger Alí.
Tras un difícil inicio en el que el rudo tomaba la ventaja, Último Dragón intentó reaccionar, pero no contó con que su rival, quien se había preparado a conciencia para la contienda, basaría parte de su estrategia en castigos al cuello y estrangulaciones, las cuales mermaron seriamente al gladiador japonés.
Por si fuera poco, Último Dragón tuvo que lidiar con las intervenciones ilegales de Arkángel, quien fungió como sécond del rudo iraní. Los momentos de mayor drama se vivieron cuando en una colmillada, Último Dragón hizo fallar un lance a Tiger Alí, y arrolló al réferi Baby Richard. Sin nadie en el ring que sancionara las acciones, se llevó con su clásico suplex al rival y lo colocó con las espaldas planas, pero el conteo nunca llegó. Después lo atrapó con una cruceta invertida, y si bien el iraní se había rendido, ninguna autoridad validaba el triunfo del japonés.
Los puertorriqueños O.T. Navarro y J.C. Fernández hicieron su aparición para castigar a Último Dragón y fueron retirados por el personal de seguridad. Tiger Alí fauleó al nipón y se lo llevó con toque de espaldas. En ese momento el réferi Teddy hizo su aparición y contó dos palmadas, pero antes de la tercera el Dragón pudo zafarse, para continuar con vida. Después de que el máximo directivo de Toryumon llevara al toque de espaldas al rudo, Arkángel jaló los pies del réferi Teddy para impedir que contara las palmadas. Parecía que los rufianes nuevamente castigarían a la mala a un maltrecho Último Dragón, a quien desde el inició de la contienda le rompieron la capucha, pero de vestidores llegó la ansiada ayuda en las personas de Marco Corleone y el japonés de más de dos metros Akebomo, quienes con par de planchas dejaron en malas condiciones a los malosos. Último Dragón aprovechó y se llevó con casita a Tiger Alí, y el Teddy regresó en ese momento al cuadrilátero para contar las tres palmadas y decretar la victoria del técnico.
Molesto, el gladiador iraní quería huir, pero fue obligado a pagar la apuesta y dejar la cabellera en el ring de la colonia Doctores.
En el duelo semifinal, Último Guerrero, Gran Guerrero y Rey Bucanero lograron imponerse a la tercia conformada por Marco Corleone, el ingobernable la Máscara y Atlantis.
El final de la lucha llegó cuando, después de un par de vuelos de Corleone y la Máscara, Último Guerrero sorprendió con rodada y toque de espaldas a Atlantis.
En un singular combate en desventaja, Máximo y el japones Akebomo derrotaron a los guerreros Tuareg, Nitro y Arkángel, quienes tuvieron por socio al Hijo del Signo.
El tradicional Dragon Scramble, en el que la eliminación sería enviando al rival hacia afuera del cuadrilátero por encima de la tercera cuerda, fue ganado en esta ocasión por Súper Ciudadano, quien derrotó en la final a su eterno rival, el Patán.
Los demás participantes de la contienda fueron Príncipe Orión, Hijo de Kendo, Hijo del Médico Asesino, Hijo del Signo, Epidemius (quien se eliminó solito, al volar por encima de la tercera cuerda sobre sus oponentes), Pantera I, Magnus, Piel Roja, O.T. Navarro y J.C. Fernández.
Algo curioso fue que estuvo a punto de darse una alianza entre Súper Ciudadano y Patán para defender el honor de la lucha libre mexicana ante los boricuas O.T. Navarro y J.C. Fernández, pero los de la isla del encanto fueron descalificados después de discutir con el réferi Baby Richard y empujarlo contra las cuerdas.
En mano a mano en estilo japonés, el nipón Okura se impone contra todos los pronósticos al francés Heddi France.
Mima Shimoda, Mayu Iwatami, Io Shirai y Diosa Atenea pasaron por encima de la India Masawa, Xena, Maligna e India Sioux.
Los Japoneses del Mal (Dowki y Hanaoka) vencieron al Imposible y Fiero.
En la de abrir el cartel, el rudo Maquiavélico salió con el brazo en alto después de que su rival se lastimara la pierna y fuera presa fácil del toque de espaldas.
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