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Los ahora ex campeones sufrieron bastante a lo largo de la contienda. Pese a ser una de las tercias con mejor acoplamiento en Naucalpan, en esta ocasión se vieron erráticos y faltos de coordinación y esto también se vio reflejado en el sentir del público, que en su gran mayoría apoyó al combinado de Triple A.

Pese a todas las dificultades, una rápida reacción comandada por AK-47 permitió que la contienda se empatara. Sin embargo, para la tercera caída, en una acción desafortunada, el mismo AK-47 salió lesionado cuando su compañero 911 trató de romper un castigo y accidentalmente lo golpeó en la quijada.

La desventaja numérica resultó una loza muy pesada para los Oficiales, y entre Joe Líder y el Último Gladiador dejaron fuera a Fierro, para que los réferis Rubinsky y Toby dieran por terminado el combate (a pesar de que el capitán de la tercia era 911) y decretaran que la Triple A se alzaba con los campeonatos.

En el duelo semifinal, Pirata Morgan e Hijo de Pirata Morgan sorprendieron a propios y a extraños al retener el cetro de parejas ante el Negro Navarro y el Trauma I.

La Dinastía de la Muerte dominó la primera caída con cierta facilidad, e incluso aplicaron unas tijeras al hombro de los Piratas, en una acción que molestó bastante a los corsarios, quienes habían solicitado que no aplicaran llaves aparentemente prohibidas (y que no lo son). Con sendos toques de espaldas, la Dinastía de la Muerte se impuso en la primera caída.

Para el segundo episodio, fueron los bucaneros quienes aplicaron esos castigos a los hombros, y posteriormente se olvidaron de cortesías y comenzaron a atacar en montón a sus rivales, para empatar así la contienda a una caída por bando.

La polémica se hizo presente en la tercera caída. Trauma e Hijo de Pirata Morgan salieron en topes, pero en su ímpetu no se fijaron que impactaron a sus padres, en lugar de a sus rivales. Al regresar al ring, Trauma falló una patada y golpeó a Negro Navarro, situación que aprovecharon los Piratas para rendir al Trauma.

El Misionero de la Muerte sacó del ring al Hijo del Pirata Morgan y con sentón y plancha llevó al toque de espaldas al autonombrado Mejor Luchador del Mundo. Rubinsky contó las tres palmadas, pero inmediatamente dio marcha atrás en su decisión, pues Pirata Morgan había despegado los hombros antes del tercer segundo. La confusión reinó tanto en el público como en el Negro Navarro y esto lo aprovecharon los filbusteros para rendir al Negro y retener el cinturón de parejas.

Pese a la derrota, la gente premió con lluvia de dinero al Trauma y al Negro Navarro.

Otros resultados

Multifacético, Veneno y Eterno vencieron por descalificación a Comando Negro, Hammer y Magnífico.

Pollo Asesino y Carta Brava júnior se impusieron a Freelance y Eragon.

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Tras varios minutos de retarse y amenazarse, los rudos iniciaron un ataque en montón que no esperaban ni Wagner ni la Parka.

Los sillazos y agresiones entre el público abundaron en la primera caída, en la cual Wagner y la Parka fueron llevados por la calle de la amargura. Silver King y L.A. Park dominaron a placer ese primer episodio y rindieron a los técnicos después de varios minutos de fuertes castigos.

La segunda caída continuaba por la misma tónica, y si bien el panorama parecía empeorar cuando L.A. Park sacó una tabla y acomodó parte de la tarima de protección para castigar a Wagner, el Galeno logró evitar el azotón y en una colmillada estrelló con un suplex a L.A. Park contra dicha tarima, lastimándolo severamente de la espalda. Ya arriba del ring, el heredero de Simón Blanco repitió el castigo, ahora proyectando a L.A. Park contra una tabla sujeta por dos sillas.

La Parka, mientras tanto, tomaba desquite de Silver King recetándole varios sillazos en la espalda.

Tras empatar la contienda, los técnicos continuaron su ataque, ahora en la pasarela y en la zona de ring side, ocasionando que varios aficionados tuvieran que hacerse a un lado para no llevarse algún golpe accidental.

El cinturón de L.A. Park también fue empleado como arma, pero en contra de su dueño. Esto, gracias a que Doctor Wagner logrará despojarlo del huesudo rudo sin que éste pudiera hacer nada para evitarlo.

Doctor Wagner y Silver King combatieron entre sí durante varios minutos, y pudo apreciarse que las rencillas entre ellos continúan más que vigentes; lo mismo ocurrió con las Parkas, que no tuvieron consideración la una de la otra.

El final de la contienda fue polémico. La Parka golpeó de manera accidental al réferi Reyes Rosas, y posteriormente el nazareno quedó sin aire cuando L.A. Park se lanzó en plancha sobre su odiado rival y éste se hizo a un lado, por lo que el castigo fue para el réferi.

L.A. Park quiso avivarse y fauleó a la Parka, pero no contó con que Wagner entraría al ring para faulearlo a él. Como pudo, la Parka cubrió a L.A. Park justo a tiempo para que Reyes Rosas contara las tres palmadas y decretara la victoria de los técnicos.

En el combate semifinal se revivieron los años dorados del Toreo de Cuatro Caminos con un combate entre Black Terry, Negro Navarro y el Brazo (quien celebraba sus treinta años como luchador) en contra del Pirata Morgan, el Ángel Mortal y el dominicano Head Hunter.

Con un madruguete por parte del Pirata Morgan sobre el Brazo, los rudos pronto tomaron el control de las acciones y se impusieron a sus rivales a base de marrullerías.

Pirata Morgan en todo momento le faltó el respeto al Brazo, a quien castigó sin piedad, mientras que Ángel Mortal y Head Hunter hacían lo propio con Black Terry y el Negro Navarro.

La reacción no se hizo esperar en la segunda caída. Brazo encabezó el ataque desquitando su coraje en contra del bucanero. Black Terry ponía en paz al Ángel Mortal y Negro Navarro rendía al Head Hunter con tremendo castigo al hombro.

El tonelaje del Pirata y del Head Hunter fue la clave para la victoria ruda en la tercera caída, la cual finalizó con toque de espaldas del filibustero sobre el Brazo y una plancha del dominicano sobre Terry y el Negro Navarro.

Los Gringos VIP (Destroyer, Hijo del Diablo, Avisman y su valet Sherry) revivieron el pique con los Oficiales 911, AK-47 y Fierro, en un duelo que puso a los aficionados al filo de la butaca.

Pese a que los Oficiales trataron de madrugar a los Gringos cuando éstos pretendían rendir honores a la bandera de Estados Unidos, el colmillo del Hijo del Diablo salió a relucir y pronto se apoderaron ellos de las acciones.

Las rudezas de los Gringos rindieron fruto en la primera caída, en la cual su valet Sherry intervino constantemente. No obstante estar en desventaja, los Oficiales aprovecharon el único descuido de sus rivales y empataron la contienda de manera muy rápida.

En la caída final, mientras Fierro y Ak-47 se encargaban de Avisman y Destroyer, 911 hizo pagar a Sherry todas sus intromisiones dándole una tremenda desnucadora de la cual la rubia ya no se levantó. Acto seguido, el líder de los Oficiales rindió con toque de espaldas al Hijo del Diablo para sellar la victoria de los enmascarados.

Una lluvia de dinero premió el esfuerzo de los seis contendientes, quienes se retaron a un duelo de apuestas.

Fresero júnior y Montaña sufrieron durante gran parte de su lucha, pero al final lograron imponerse a los rudos Hammer y Magnífico en tres reñidas caídas.

En la de abrir el cartel, la velocidad y los lances de Dinamic Black y Alan Extreme fueron la clave para que en un rápido combate se impusieran a los rudos Imposible y Keshin Black.

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